Noemí Valdez.- El recién nombrado Fiscal Anticorrupción, Marcos Even Torres, dijo que personalmente no considera que deba legitimarse en el cargo y sentenció que no presentará su renuncia.
“Soy respetuoso de todas las opiniones y vine a trabajar por los veracruzanos y de una u otra forma (…) Todo fue satisfecho y cumplimentada a cabalidad. No hay ningún acto de ilegalidad desde mi perspectiva”.

Al respecto, dijo que su designación cumplió con la Constitución, la Ley Orgánica y la convocatoria e insistió en que es su intención permanecer durante los cinco años de su encargo y trabajar con el gobernador electo Cuitláhuac García Jiménez.

Cuestionado sobre su cercanía con el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares, dijo que lo ha visto en tres ocasiones y han sido en eventos públicos y sobre su relación con el fiscal general Jorge Winckler, dijo que aunque no niega su amista no afectará su objetividad.

Sobre el sistema estatal, dijo que a partir de ahora se debe implementar la estructura, adicionar el reglamento de la Fiscalía y después de ello establecer un presupuesto que el Congreso local deberá designar.

Consideró que se debe acercar la fiscalía anticorrupción a las ciudades alejadas de la capital pues en muchas ocasiones la lejanía genera un aislamiento del ciudadano para interponer las denuncias pertinentes.