Sergio Ramírez/Orizaba, Ver.- A pesar de que las subvariantes de COVID-19 que hay en el estado, la BA.2 y BA.4, tienen un ritmo acelerado de contagio, no hay un solo paciente que esté hospitalizado grave en terapia intensiva, señaló el secretario de Salud en el estado, Gerardo Díaz Morales.
Entrevistado a su llegada a la sede delegacional del IMSS; en donde tomó protesta como consejero propietario por parte del gobierno del estado en el Órgano de Operación Administrativa Desconcentrada (OOAD), agregó que aunque algunos enfermos se han complicado, la experiencia que han tenido a lo largo de la pandemia les ha permitido sacarlos adelante.
Recordó que este virus llegó para quedarse y se tiene que aprender a vivir con él, con alzas, con bajas, pero afortunadamente en Veracruz el índice de vacunación es alto, sobre todo de personas vulnerables, con un 90 por ciento, lo que ha permitido que se tengan pocos hospitalizados y todos ellos debidamente controlados.
Mencionó que a pesar de las vacunas, el uso del cubrebocas se considera esencial para espacios cerrados.
En otro tema, Díaz Morales reiteró que el edificio en donde estaba el Centro de Atención Médica Extendida COVID-19 se revisa para ver qué hace falta y se le dé uso como nuevo hospital de salud mental.