El presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador, durará en el cargo 5 años y 10 meses, un periodo menor a los seis años que sus antecesores estuvieron en Los Pinos.
Esto, debido a la reforma político electoral, impulsada por el presidente Enrique Peña Nieto en 2014.
Esta reforma consiste en reducir de cinco a tres meses el periodo de transición entre un presidente y el otro, por lo que los mandatarios –a partir de López Obrador– dejarán su cargo el 30 de septiembre y sus sucesores rendirán protesta el 1 de octubre.
Por esto, López Obrador tomará el poder el 1 de diciembre próximo y terminará su gobierno el 30 de septiembre de 2024; es decir, dos meses menos que sus antecesores inmediatos.
La reforma al Artículo 83 constitucional, publicada el 10 de febrero de 2017 en el Diario Oficial de la Federación, señala que a partir de 2024:
“El presidente entrará a ejercer su cargo el 1 de octubre y durará en él seis años. El ciudadano que haya desempeñado el cargo de presidente de la República, electo popularmente o con el carácter de interino o sustituto, o asuma provisionalmente la titularidad del Ejecutivo, en ningún caso y por ningún motivo podrá volver a desempeñar ese puesto».
Este ajuste en la fecha tiene como objetivo que el Ejecutivo entrante envíe al Congreso de la Unión la iniciativa de Ley de Ingresos y el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación, con lo que se evita que el presidente saliente fije la política económica del primer año del nuevo mandatario.
Fuente, Excélsior