POR: Francisco . Carranco.- Hace un par de semanas, más o menos, en el informativo sabatino de “Por Consiguiente” trasmitido por las plataformas de “loseditores.com y araucariadigital.com, el presidente del CDE del partido “Redes Sociales Progresistas” Antonio Lagunes Toral, manifestó su preocupación por amenazas reportadas por algunos militantes que han externado su deseo de participar en los procesos por una candidatura de elección popular.
Los testimonios que expresó el líder de RDS, en esa ocasión, da cuenta que, a través de mensajes intimidatorios contra algunos militantes, en este periodo electoral, los aspirantes son víctimas de algún tipo de presión para inhibir su participación en la política y mas cuando se pretende ser alcalde o diputado en zonas donde se perciben conflictos por intereses particulares.
Todo quedó como una preocupación y manifiesto el interés para solicitar a los órganos electorales, a las autoridades encargadas de la seguridad pública, así como al Gobierno del Estado para que garanticen la seguridad, de la ciudadanía y los involucrados, en este proceso democrático y se preserve la paz en lo electoral y la integridad física de todos los contendientes de todos los partidos.
Sin embargo, la primera víctima registrada como un crimen político fue el asesinato del precandidato por MORENA a la alcaldía de Úrsulo Galván, Juan Gilberto Ortiz Parra, atacado con arma de fuego el jueves pasado en el municipio de Puente Nacional.
El aspirante morenista no sobrevivió al atentado y, aunque fue levantado aún con vida y recibió atención medica, no fue posible salvarle la vida y falleció en las instalaciones del Seguro Social en la población de Cardel, Ver.
El Crimen, de Juan Gilberto Ortiz Parra, enciende los focos rojos de alerta a todos los partidos, quienes tendrán que ser muy cuidadosos en la selección de sus aspirantes ya que se presume, con este atentado, que hay intereses obscuros que propiciaron el ataque al precandidato.
Y eso es lo más difícil de comprender, ya que el aspirante a la alcaldía aún no era tal, era un precandidato que debería someterse a las reglas del partido para salir como candidato, luego de obtener la mayoría de los militantes en la selección o la suerte de haber sido elegido por medio del sistema de tómbola, que generalmente utiliza MORENA, para determinar quien será en candidato y representante final del partido, en la elección constitucional.
El crimen del aspirante de MORENA alerta sobre la violencia política que pudiera existir en este proceso electoral, ya que el asesinato esta tipificado como una de las principales causas de intimidación para que, ciertos grupos o intereses, impongan miedo y presión para sus beneficios.
La ciudadanía se aleja de los procesos electorales por miedo a esa violencia, por ello, es importante que las autoridades encargadas de la seguridad pública, tomen este atentado y homicidio del candidato de Úrsulo Galván, como una prueba en donde deberán plantear estrategias, pero ya, y evitar otros casos que atenten contra los candidatos, partidos o ciudadanos que, en pleno uso de sus derechos de votar y ser votados, puedan ejercer ese derecho en paz y seguros, sin miedo y con la confianza de que no sufrirán ninguna ataque o violencia electoral.
El INE, el OPLE, y las autoridades del Gobierno, principalmente, las encargadas de la Gobernabilidad y la Seguridad Pública, deben de comprometerse a neutralizar con todo el poder del Estado cualquier tipo de violencia que vulnere los derechos fundamentales de los ciudadanos.
El poder del estado debe aplicarse para el cumplimiento de las normas y ante el peligro de la inseguridad, provocada por estos actos delincuenciales, inmersos en la política, la violencia siempre se ha utilizado para lograr un fin, la violencia política es entonces el uso de la fuerza para ejercer o conquistar el poder factico en detrimento del poder legitimo, potestad del Estado.
La violencia con sus comportamientos genera daños físicos y psicológicos a la sociedad; a través del vandalismo y de la delincuencia organizada en sus diversas y múltiples manifestaciones puede poner en riesgo las elecciones del 06 de junio fomentando la anarquía y poniendo en riesgo la democracia y la transición de poderes en el estado.
Quizás en estos momentos ya se estén instrumentado las acciones para dar con los homicidas del precandidato e MORENA y estableciendo los protocolos de seguridad para los candidato, militantes y partidos políticos que ya están en sus procesos internos para elegir a los candidatos rumbo a la elección constitucional.
Obviamente, suponemos que los eventos peligrosos están focalizados y la fuerza del estado estará trazando las estrategias para garantizar unas elecciones limpias, transparentes y con la seguridad de que no habrá agresiones ni eventos que pudieran ensombrecer el proceso democráticos del próximo 06 de junio, esperamos paz y tranquilidad para poder ejercer nuestro derecho al voto, con toda la seguridad, sin miedo y seguros de que el estado cumplió su promesa de salvaguardar la democracia en Veracruz, con el ejercicio pleno de unas votaciones limpias hasta que alguien diga lo contrario.