Por Francisco L. Carranco.- En las mañaneras del presidente AMLO, poco a poco, se empieza a evidenciar que la corrupción dentro de la administración pública tiene su origen directo en la impunidad que cubre, como manto sagrado la perversidad de todos los funcionarios que, históricamente, han construido esa protección para delinquir en cualquier nivel de gobierno, dentro del contexto del no pasa nada.
No acabamos de digerir las complicidades de, que tienen al ex director al borde del penal por todas las irregularidades en la operación de la paraestatal y que de paso embarró a otros ex funcionarios y funcionarios en activo a los cuales se les podría fincar responsabilidad en cadena hasta el Presidente Peña Nieto, sólo sí el pueblo lo pide.
Y en estos días, el Presidente AMLO, descubre y acusa a por lo menos, a 500 agentes de Migración, que serán cesados por actos de corrupción en la frontera sur y que serán señalados como los principales operadores de la inmigración ilegal a nuestro país con actos equiparables a la venta de esclavos y tráfico de personas desde las entrañas del Instituto Nacional de Migración.
Bastó poner un poco de atención en el porqué del gran flujo de migrantes, darnos cuenta oficialmente que estos agentes y las propias oficinas fronterizas de migración estaban trabajando para sus propios intereses, dejando pasar a miles y miles de extranjeros, que pronto se convirtieron en cientos de miles de migrantes ilegales que invadieron a nuestro país desde la frontera sur.
Luego circulan videos en las redes y en los noticieros de televisión que dan cuenta de policías ministeriales y de seguridad pública del estado de México, que ponen operativos ilegales para extorsionar, detener y hacer detenciones ilegales, sembrando droga y armas para sacar, bajo extorsión y amenazas, dinero a los ciudadanos.
La velocista, Ana Gabriela Guevara, señalada, también, de malversación de recursos y becas a deportistas nacionales y omisión en trámites que tienen que ver con la aplicación de estímulos para los jóvenes atletas de alto rendimiento y otras cosas.
Los juicios de todos los denunciados ex gobernadores, ex funcionarios de todos los niveles y hasta el último presidente de la república que goza, como príncipe heredero, de todas las riquezas hechas y consolidadas durante su mandato y que dejo a sus súbditos para que taparán todo y de ser posible respondieran ante la justicia si así fueran requeridos
La promesa del Presidente AMLO de no venganza ni persecución a los malos funcionarios de gestiones pasadas, que de alguna u otra forma están vinculados a los fraudes y tráfico de influencias para pegarle duro a la desaparición de los recursos de pueblo, obviamente, con la fraudulenta administración pública, pareciera que siguen midiendo fuerzas con el gestión del actual presidente que está dispuesto a acabar con la corrupción, pero no con el origen directo, insisto, no es la corrupción en s ímisma, sino la impunidad que es la que genera la corrupción en todas sus modalidades.
Y, necesariamente, los nuevos funcionarios de la 4T comprometidos con la erradicación de la corrupción deberán llevar a efecto el compromiso, empezando por el Presidente López Obrador, para dar certeza al pueblo con acciones en contra de la impunidad, iniciando por el pasado inmediato, es decir, por todos los que dejaron al país como AMLO dice que recibió a la nación.
Es hora de ir por los todos aquellos que devastaron al país en la economía, en la salud, en la infraestructura, en el progreso y desarrollo de México que, con las prácticas especializadas en la corrupción, generaron el cochinero del que diariamente se queja el Presidente AMLO.
Ya no hay lugar para las quejas, México necesita resultados y los más inmediatos son sancionar y fincar resultados con castigos, dentro de la ley, contra todos aquellos que se llevaron la riqueza nacional, con contratos leoninos, robos descarados, tranzas de todo tipo, complicidades en negocios y contratos, la venta de justicia o injusticia, al mejor postor, además de vulnerar a las instituciones garantes de la seguridad de la ciudadanía, que en casos como el de los 500 agentes de migración o los policías ministeriales extorsionadores, que, junto con las policías estatales, salen a delinquir porque en este país no pasa nada.
Con ansias y gran esperanza, se espera en la Ciudad de México, que la Guardia Nacional que, entra en operación luego de conocerse todas las deficiencias de las policías de Seguridad Pública que han sido rebasadas por el crimen organizado y los delincuentes del fuero común, pongan orden y en paz a los habitantes de CDMEX.
En este momento y según datos de la Organización de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad, México, es el cuarto país con la mayor impunidad en el mundo, señala que la burocracia alrededor de la justicia, por ejemplo, perpetúa la impunidad porque la gente que se atreve a denunciar ilícitos del crimen o de la policía, recibe amenazas y advertencia que obliga al ciudadano a refugiarse en la indefensión para no ser víctima de represalias.
El discurso político sobre Corrupción e Impunidad debe bajarse a la realidad y ejecutar medidas estrictas, disciplinarias y ejemplares contra los corruptos, para que estos males se puedan erradicar, porque si no, las cosas poco apoco irán tomado el curso histórico de perpetrar y consolidar las practica inmorales y ventajosas que ofrece el aparato gubernamental en contra de los ciudadanos y los nuevos funcionarios “honestos y comprometidos” que son los menos, queden como ineficientes o, de plano, le entren al negocio como, por ejemplo, los órganos especializados en la fiscalización y transparencia, total, en este país no pasa nada.
Finalmente, la impunidad es con un manto sagrado que cubre a los que están dentro, ya se verá…
Suburbio 1
Que el alcalde, Hipolito, recibirá la confirmación de lo que la gente piensa de él, a través de una encuesta telefónica.