A mi hermano Víctor, otro mayo…
Carlos Alberto Duayhe Villaseñor.- Se puede afirmar con un muy aproximado grado de acierto que la sociedad ha recibido nutrida información lo que acontece en el orbe, urbes, poblados y rancherías, a causa del Covid 19.
Cualquier medio de comunicación colectiva –como se decía antes- sea electrónico, impreso, redes- cuenta de manera muy detallada lo que va ocurriendo en los cinco continentes en materia de salud, no sin asombro, miedo y confinamiento.
En México, los habitantes en general, confinados o no, se levantan y se acuestan con toda clase de noticias relativas al tema no sólo de lo que oficialmente se dice, sino de lo que ocurre.
Y de sus efectos, daños colaterales diría un panista innombrable, paralelos, que afecta muy severamente a pobres, clases medias y uno que otro ricachón si se atonta y quiebra la empresa o empresas, en la economía.
Una sociedad se integra de muchas partes y conforma un todo, se puede llamar nación, país, estado.
El gobierno electo es el responsable del interés público y no hay día que no se escuchen críticas del exterior, del interior, memes de todo tipo y hasta bromas, de lo que acontece en torno al Covid 19 famoso y presente.
La pandemia: qué si llegó tarde, qué si le salen las estimaciones, que si la curva llegó al pico, que si se aplana, que si los hospitales están saturados, que si hay médicos, médicas, enfermeras y enfermeros, intendentes que salen con el Covid o corriendo, a saber, y que si el gobierno es ineficiente como dicen exsecretarios de Salud del PRI, del PAN, especialistas, lista interminable, ante una pandemia que con todo y festividades privadas y hasta religiosas, está dejando hogares enlutados.
Muchos no pueden estar confinados porque si no salen a buscar sustento, a trabajar, entran en una desesperación que ojalá no se desborde en el país, en esas estamos.
Con todo el gobierno tiene que hacer su parte, guste o no, y que lo haga ya no digamos bien, sino con responsabilidad ante una urgencia que está trastocando todo y que rebasa todo.
Si hay acierto, que bueno y si en lo económico hay aceleración, también, de lo contrario los vuelcos serán irreversibles con todo y todo y ojalá, por el bien general, sea así.
De nuestra parte, aguantar y mantener distancia como dice la campaña mundial, dejar de salir cuando no sea necesario y aun así a ver cómo nos va así como mantener la unidad en la medida de lo posible de los sectores sociales y evitar tantas diferencias y divisiones como se está viendo.
Atraques
- El presidente Andrés Manuel López Obrador tuvo que rectificar sus aseveraciones en torno al mercantilismo de la práctica médica. Sí y no tiene razón. Hay médicos y médicas, dicho por sus propios pares, que de plano sí hacen muy buenos negocios, operan por todo, con legítimos aunque dudosos ingresos y por año nunca declaraban al fisco ¿dónde se ha oído eso? Otros, muy valiosas y valiosas, todos los respetos a su profesionalismo. Aunque el mandatario, si tiene pruebas, que las denuncie.
- La ley Bonilla, del gobernador de Baja California Norte, quien electo de por dos años quiso subir a 5 su periodo, fue echada atrás por inconstitucional. Terreno pantanoso que contradice el viejo lema del sufragio efectivo no reelección ¿Se acuerdan?
- En Veracruz, mientras sube de forma natural la pandemia, sigue en enorme vacío el cuidado al medio ambiente y protección a la naturaleza, la contaminación de ríos, lagunas, arroyos, es tremenda, o provienen de actividades industriales o de residuos domésticos y basura. Elementos químicos en las aguas, todos lo de la tabla del señor Mendelev.