El uso de bastones retráctiles por parte de agentes del Instituto Nacional de Migración (INM) durante una redada migratoria en Orizaba desató indignación entre los ciudadanos.
Durante el operativo, realizado en la colonia Agrícola Librado Rivera, testigos presenciaron cómo agentes usaban toletes para perseguir a migrantes.
Al notar la presencia de prensa y vecinos que grababan, ocultaron rápidamente estos objetos, lo que sugiere conocimiento de que su uso podría constituir un abuso.
Vecinos aseguran que estos hechos son cotidianos y que muchas veces los migrantes son sometidos de forma violenta, insultados o incluso despojados de sus pertenencias.
La comunidad afirma vivir con temor a represalias por parte de las corporaciones si denuncian lo que ven.
La situación se da mientras en el extranjero se intensifican protestas por redadas contra mexicanos, evidenciando una doble moral en el trato a las personas en tránsito.