POR: Francisco L. Carranco.- La frase enarbolada y que hizo famosa nacionalmente, el Presidente de la República, al referirse a un cuestionamiento de un periodista, hace ya varios meses, con el cual tenía diferencias en la información y que, como siempre, desde su particular punto de vista y para acallar el debate dijo: “Yo tengo otros datos” inmortalizada, pues, aparece en cada discrepancia cuando hay datos de por medio.
El último personaje que definitivamente se ve que trae otros datos es el ilustre epidemiólogo Hugo López Gatell, quien durante más de 50 días diariamente por las tardes y, en ocasiones por la mañanera, da cuenta e informa del situación y evolución del Coronavirus-Sars-Covid-19, en el país y mundo para trasparentar el avance de la enfermedad y su afectación a la población.
Definitivamente el doctor, López Gatell, se ha convertido en uno de los hombre mediáticamente más poderoso en la actual situación de crisis sanitaria, un elocuente ahora político que maneja todas las virtudes del discurso político y social que durante los informes técnicos diario ha logrado atraer la atención de la sociedad que está atento al reporte para justificar el encierro, la sana distancia y el deterioro económico que conlleva, entre otros tantos datos que presenta diariamente para equilibrar la información preocupante de los infectados, sospechoso, fallecidos y negativos.
Toda la información vertida, en la conferencia vespertina, es un modelo matemático el “Centinel” que es el sistema central que acumula, analiza y distribuye la información diaria que todas las entidades reportan diariamente en cuanto a sucesos asociados al COVID-19, un gran esfuerzo que reporta cifras para el informe, nada más.
Sin embargo y según las propias explicaciones de López Gatell, es un modelo que representa una muestra representativa de las condiciones del avance del virus en nuestro país, se alimenta, reitero, de los reportes de los estado del país según se deriva de los contagios y algunos otros síntomas que parecen ser los síntomas del COVID-19, pero, que finalmente son casos negativos.
Esta situación ha provocado que los ciudadanos que se interesan más en el tema y que temen por su salud, están pendiente de dicho reporte diario y de acuerdo con los datos, se han encaminado a buscar más información con los sitios oficiales que reporta el Doctor López Gatell en la conferencia vespertina.
Y aquí es donde las discrepancias entre los datos oficiales de los estados no coinciden con el dato oficial de: https://datos.gob.mx/busca/dataset/información-rferente-a-casos-covid-19-en-mexico que pone en duda o genera suspicacias, de ese cruce da datos surgen los malestares de varios analistas, estudiosos y curiosos que al cruzar el dato oficial de su entidad federativa con los datos nacionales y estatales, inmediatamente, surgen cifras diferentes en cada uno de los sitios de consulta.
Esta semana hay un ejercicio publicado en varios medios locales de Veracruz, donde el alcalde de Orizaba Igor Rioji, señala que mientras el estado reporta una persona fallecida en la esa ciudad, la realidad es que son tres defunciones por ese mal.
Veracruz no es el único caso, puede cruzar datos de cualquier entidad con el sistema nacional de información de Coronavirus y las cifras discrepan.
El propio Subsecretario, ha dado todos los escenarios posibles sobre la discrepancias iniciaron desde que es una muestra representativas de los casos en cada estado, que los datos se cargan diariamente, pero, que hay algunos que no se contabilizan durante la conferencia de prensas y una serie de información muy demagoga para tranquilizar a los receptores de la información que asisten a la conferencia y que la siguen por medios de comunicación tradicionales y las plataforma electrónicas.
Voces surgen en varios sectores sociales y coinciden que los datos e Gattel son diferentes a los publicados y a los que la gente recibe, la propia Claudia Sheimbaum, diariamente y paralelo a los datos del sector salud, ella solicita directamente las cifras de personas fallecidas en los hospitales de la Ciudad de México. Claudia Sheinbaum, comenzó a sospechar que los datos federales y los modelos sobre la epidemia eran defectuosos, según tres personas con conocimiento del asunto.
El ex rector José Narro, ex rector de la UNAM, fue el primer antagonista contra los datos de Hugo López Gattel que, incluso, lo invitó a revisar juntos las estadísticas que cada día publica en la vespertina el subsecretario de Salud, además de checar datos sobre el tratamiento de la enfermedad.
Algunos periódicos nacionales que, en sus redacciones, tienen periodistas profesionales han empezado a analizar las cifras, modesta y tímidamente han iniciado una crítica suave contra los datos relativamente “transparentes” que Hugo López Gatell ofrece en las conferencias de prensa.
Luego algunos gobernadores de Baja California, Tlaxcala y algunos alcaldes, afirman, que las cifras mortales de sus ciudadanos no cuadran con los datos oficiales ese es el problema que acaba de rebasar fronteras y periódicos de la prensa internacional como el New York Times, El País y el Washington Post que critican al funcionario federal por el conteo de datos y el desarrollo estadístico de las consecuencias del Coronavirus que no, necesariamente, la realidad del país.
Lo bueno de todo esto si es que se puede hablar de bueno, es la intención de tener transparencia con datos sesgados, es decir, que la información que está fluyendo, hay un seguimiento de la enfermedad, de los contagios, sospechosos, positivos y negativos, es indudable que convivimos con el virus y su daño directo sobre la población, que las cifras no cuadren, no quiere decir que la enfermedad no exista.
Como guía del avance de la enfermedad en la totalidad de las cifras reportadas, independientemente, de la cuantificación de personas infectadas y muertas ha impactado a la sociedad, que está pendiente y sabe, a través de esos números, que la crisis sanitaria avanza y sigue siendo un factor de riesgo importante y amenazante para provocar una epidemia, con consecuencias inimaginables. Al margen de las estadísticas.
Suburbio 1
Quédense en casa y haga caso de las recomendaciones las autoridades.